Salud en Casa.- La playa, con su ambiente relajante y su terreno natural, es un perfecto destino vacacional, pero también nos ofrece una serie de beneficios terapéuticos para mejorar nuestra salud física y emocional. La arena y el agua proporcionan superficies inestables que obligan al cuerpo a realizar constantes ajustes para mantener el equilibrio, lo que a su vez fortalece los músculos estabilizadores del tronco, caderas, rodillas y tobillos.
“Caminar descalzo por la arena es una actividad aparentemente simple, pero puede tener beneficios sorprendentes. Esta práctica estimula los músculos de los pies y tobillos, mejora la alineación postural y refuerza el arco plantar, lo que puede prevenir problemas como el pie plano o la fascitis plantar”, afirma la Lic. Wendy Lozano, coordinadora de la carrera de Fisioterapia y Rehabilitación del Instituto Carrión.
Teniendo en cuenta ello, la especialista recomienda cinco actividades en la playa para mejorar la movilidad y reducir el estrés:
“Recuerde que antes de iniciar cualquier rutina debe consultar con un fisioterapeuta, especialmente si tiene alguna condición médica preexistente. Asimismo, no olvide el calentamiento previo para evitar lesiones y mantenerse siempre hidratado. Por último, evite las horas de mayor exposición al sol y use protección solar adecuada”, menciona la especialista del Instituto Carrión.