Salud en Casa.- La prevalencia de enfermedades tiroideas en el sexo femenino es más frecuente que en los varones debido a que la mujer es más propensa a desarrollar enfermedades autoinmunes y el 80% de los casos de trastornos tiroideos es el factor autoinmune, en especial mayores de 50 años ", dijo la doctora Evelyn Huamán, médico endocrinólogo .
“Por cada varón hay por lo menos veinte mujeres que presentan problemas de tiroides, por lo que se les recomienda hacerse chequeos periódicos y un despistaje con TSH (hormona estimulante de la tiroides) en caso presenten algunos síntomas de la enfermedad”, precisó.
De acuerdo a la experta, existen dos tipos de trastorno tiroideo: el hipotiroidismo (deficiencia de hormonas tiroideas) y el hipertiroidismo (exceso de producción de hormonas tiroideas). La prevalencia global entre ambos se acerca a los índices de la diabetes, entre 9 a 11 por ciento a nivel mundial.
“Los casos más frecuentes son de hipotiroidismo, alrededor de un 5 por ciento de la población mundial, en comparación con el hipertiroidismo que está entre el 2 y 3 por ciento”.
Factores de riesgo
Evelyn Huamán, manifestó que aunque no se puede precisar con exactitud los factores que provocan el trastorno de la glándula tiroides, en la mayoría de casos se debe a factores genéticos, autoinmunes o deficiencia de yodo. Otros factores desencadenantes pueden ser la presencia de tumores (malignos o benignos) o procesos inflamatorios.
Síntomas
Las personas que presentan este problema son propensas a sufrir arritmia, aborto e infertilidad.
En el caso del hipotiroidismo las personas presentan problemas de memoria, sequedad de la piel, caída de cabello, sensación de frío excesivo, voz ronca, hinchazón especialmente en las piernas, estreñimiento, irritabilidad, colesterol alto, problemas cardiovasculares, y en las mujeres trastornos menstruales.
En el hipertiroidismo el paciente presenta nerviosismo, taquicardia, pérdida de peso, hiperdefecación, sensación de calor extremo, sudor constante, e incluso hipertensión. También están en riesgo las mujeres gestantes y los que tienen antecedentes familiares con problemas de tiroides o enfermedades inmunológicas como diabetes tipo 1 o vitíligo.