Salud en Casa.- Para nadie es un secreto que las enfermedades como la diabetes, hipertensión, cáncer, entre otras, son las principales causas de mortalidad y discapacidad en el mundo moderno.Si bien gran parte de estas patologías tardan años en desarrollarse, existe un indicador que todos deberíamos conocer y que podría alertar oportunamente acerca del riesgo de presentar algunas de estas alteraciones: el síndrome metabólico.
En lenguaje común, el síndrome metabólico, más que una enfermedad es un conjunto de factores de riesgo que se presentan al mismo tiempo en el organismo de una persona, como obesidad, presión arterial alta, colesterol HDL (colesterol bueno) bajo, niveles elevados de azúcar o triglicéridos, condiciones que vienen siendo manifiestas en gran parte de la población.
De acuerdo con cifras oficiales, el 60% de peruanos, mayores de 15 años, presenta obesidad o sobrepeso; mientras que, 1 de cada 5 personas, en este mismo rango de edad, tienen hipertensión arterial. Por otra parte, se estima que hay un importante grupo que aún no ha sido diagnosticado en cualquiera de estos trastornos y, en esa línea, existe una alta probabilidad que presenten síndrome metabólico y no lo sepan, exponiéndose en un futuro al desarrollo de enfermedades como diabetes tipo 2, infartos y otros problemas cardiovasculares.
El efecto que tiene este síndrome en la salud de las personas impacta, a su vez, en su desempeño laboral, ya que, al presentar esta condición, disminuye su productividad y aumenta el ausentismo laboral. Además, por la reincidencia de las personas a los centros de salud representa una carga importante para el sistema de salud.
Una clara muestra de la prevalencia de este síndrome en esta población, son los casos identificados en nuestras clínicas durante los últimos años, en los cuales se puede observar que alrededor del 60% de los trabajadores a los que se les realizó exámenes médicos ocupacionales presentan un factor de riesgo metabólico y casi el 40% cuentan con hasta dos factores, cifras que se manifiestan de modo más o menos similar en todos los colaboradores a escala nacional, sin importar rangos de edad, género, actividades laborales o región donde se realizan.
Ahora, ¿Qué se puede hacer para cambiar esta realidad? Mucho, pero es un proceso que lleva tiempo y que requiere de la participación de todos. Es necesario que tanto las autoridades del sector, junto a todos los que formamos parte del sector salud, trabajemos de forma unificada para impulsar la educación y prevención del síndrome metabólico, ya que la identificación y control oportuno significaría la reducción del riesgo de las enfermedades crónicas, y esta es una prioridad para la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de hecho p ara cualquier reforma o mejora del sistema de salud.
En el caso de las empresas, estas tienen un rol clave para reducir los factores de riesgo indicados, a través de la promoción de programas preventivos de estilos de vida saludable con el único propósito de hacer posible que toda persona que forma parte de la compañía lleve una vida más sana. De esta manera, el impacto en la reducción de accidentes, ausentismo por enfermedades, presentismo laboral, predisposición a colaborar y mejorar ambiente de trabajo, serán efectos de tal esfuerzo. De hecho, en la actualidad existe un grupo importante de empresas que vienen desarrollando, desde diversos ángulos, estos programas, a las que felicitamos con mucho entusiasmo.
Desde Pulso Salud continuaremos con nuestra Visión y Misión, buscando impactar positivamente en la salud de los trabajadores y sus familias, así como apoyando a las empresas con programas integrales de salud ocupacional basados enejes estratégicos como la promoción de alimentación saludable, la práctica de actividad física, el manejo del estrés, entre otros, los cuales contribuyen en la prevención de estas alteraciones, a fin de aportar en la continuidad y productividad laboral, y,por ende, con el desarrollo del país.