Salud en Casa.- Según Sedapal, el consumo diario promedio de agua solo en Lima es de aproximadamente 250 litros, sin embargo, existe un riesgo de contaminación por el mal estado de las tuberías advirtió Antonio Cotera, especialista de Pavco Wavin, quien brinda recomendaciones para realizar un control de calidad de este vital recurso y evitar enfermedades.
Es importante examinar cualquier fuente de agua potable, indicó el especialista, quien resaltó que una forma casera de analizar la calidad es colocar el líquido proveniente de la llave en un vaso de vidrio para verificar que este sea completamente transparente, limpio, sin sabor, libre de olores y no presente turbulencias, es decir, irregularidades o partículas.
El agua es el principal transporte de nutrientes en el cuerpo y es fundamental que sea potable, porque su consumo en malas condiciones está relacionado a perjuicios en la salud.
“Existe un gran número de consecuencias en las personas al consumir agua mal tratada, como la transmisión de enfermedades e incluso la muerte. Una de las más comunes es el plomo en la sangre, que, a pesar de las regulaciones, sigue siendo un problema a causa de tuberías de mala calidad, que se siguen fabricando con un estabilizante de temperatura a base de plomo”, Pavco Wavin las fabrica con un estabilizante a base de estaño y de calcio-zinc, que son estabilizantes inocuos para la salud señaló el especialista.
Cotera también recomienda acudir a un profesional para que realice una evaluación periódica y verifique si el agua cumple con los requisitos para ser potable, porque algunas características nocivas no se perciben a simple vista, como la presencia de bacterias y gérmenes.
“Contar con una red de distribución hidráulica en casa no garantiza su seguridad para el consumo. Es recomendable no tomar agua directamente de la llave, sino hervirla para eliminar posibles impurezas”, indicó Antonio Cotera.
Por otro lado, se recomienda seguir lo estipulado por el reglamento nacional de edificaciones. (RNE) en cuanto a cumplir con los tamaños de tanques y cisternas, pues se cree que, almacenando agua en grandes cantidades, nos estamos protegiendo contra el desabastecimiento de agua, Cuando en realidad estamos atentando contra nuestra salud, pues el cloro residual presente en el agua para conservarla potable desaparece y deja de protegerla en 24 horas.
Otra medida que ayuda para un consumo seguro es contar con un purificador en casa, porque disminuyen los riesgos de ingerir agua contaminada. Son sencillos de instalar, más rentables a largo plazo y su mantenimiento es sencillo. Es fundamental desinfectarlo y conservarlo limpio.
Para evitar problemas en la salud es importante contar con productos que garanticen la calidad del recurso, como los de Pavco Wavin, que están diseñados para contribuir con el cuidado de la salud al no contener plomo ni componentes tóxicos, asegurando el estado óptimo del agua para el consumo humano.