Nuevo año, nuevas decisiones: cuándo es el mejor momento para planificar una cirugía plástica
29 Diciembre, 2025
Enero y febrero se consolidan como meses clave para evaluar una cirugía plástica.
La disponibilidad de tiempo, las vacaciones y una mejor organización personal influyen en una decisión que debe tomarse con información y planificación médica.
Salud en Casa.- El inicio de un nuevo año suele venir acompañado de balances personales y decisiones orientadas al bienestar. En ese contexto, muchas personas comienzan a evaluar procedimientos de cirugía plástica no solo por motivos estéticos, sino también funcionales y de salud. Enero y febrero se presentan como meses estratégicos para informarse, realizar evaluaciones médicas y planificar intervenciones de manera responsable.
"El comienzo del año es ideal para evaluar una cirugía con calma, sin la presión del día a día. Los pacientes pueden organizar mejor sus tiempos y entender claramente los cuidados y la recuperación que requiere cada procedimiento," señala la Dra. María del Carmen Martínez, cirujana plástica y directora de Cirugía Plástica Martínez.
Durante el verano, la disponibilidad de vacaciones y días libres permite que los pacientes cuenten con mayor margen para el reposo y el seguimiento médico. Sin embargo, la experta, enfatiza que no todas las cirugías deben realizarse de inmediato, sino que muchas pueden planificarse para las semanas o meses posteriores, una vez completados los estudios y evaluaciones correspondientes.
En esa misma línea, comparte tres factores clave a considerar al planificar una cirugía al inicio del año:
- Tiempo de recuperación y organización personal. Uno de los principales motivos por los que se eligen estos meses es la posibilidad de disponer de tiempo de calidad para el postoperatorio. Intervenciones populares como la liposucción, la rinoplastía o las cirugías mamarias requieren reposo, controles y cuidados específicos. Contar con una agenda flexible permite cumplir con estas indicaciones sin afectar actividades laborales o familiares.
- Vacaciones y menor presión laboral. Para muchos pacientes, el periodo de verano coincide con vacaciones o menor carga laboral. Esto facilita tanto la cirugía como la recuperación, ya que se reducen desplazamientos, estrés y exposición a actividades que puedan interferir con el proceso de cicatrización. No obstante, se recomienda evitar decisiones apresuradas y aprovechar este tiempo para una correcta evaluación médica.
- Evaluación médica y planificación responsable. El inicio del año es un momento ideal para realizar consultas, exámenes preoperatorios y definir expectativas realistas. Los especialistas subrayan la importancia de evaluar el estado de salud general, antecedentes médicos y objetivos del paciente antes de programar cualquier intervención. Este proceso es clave para garantizar resultados seguros y satisfactorios.
"Planificar una cirugía es tan importante como la cirugía misma. Elegir el momento adecuado, informarse y seguir las recomendaciones médicas marca la diferencia en los resultados y en la recuperación," añade la Dra. Martínez.
Sin duda, comenzar el año con decisiones informadas permite que los procedimientos de cirugía plástica se integren de manera responsable a un plan de bienestar personal. Ya sea para mejorar una condición funcional o lograr un cambio estético, enero y febrero representan una oportunidad para evaluar opciones, organizar tiempos y priorizar la salud en cada etapa del proceso.
