Salud en Casa.– La diabetes tipo 2, la más frecuente en el Perú, no solo afecta la salud física, también golpea directamente la productividad y la economía de familias. Según reportes del Ministerio de Salud, este tipo de diabetes ocupa el 96% de casos en el país y el 98% se concentra en adultos, principalmente aquellos que se encuentran en plena edad laboral, y adultos mayores.
En la semana del Día Mundial de la Diabetes (14 de noviembre), los especialistas advierten que tienen riesgo de padecer este mal quienes tienen obesidad, las personas que viven bajo estrés y con una alimentación basada en harinas y azúcares, además del factor hereditario. El Instituto Nacional de Salud alertó que más de 2 millones 500 mil peruanos conviven con la diabetes. Incluso es la séptima causa de muerte en el país y una de las que más rápido crece.
Para el doctor Augusto Quispe, médico y docente de Medicina Preventiva y Comunitaria de la Universidad de Piura, cuya Escuela de Medicina recibió hace pocos meses la acreditación del Consejo Mexicano para la Acreditación de la Educación Médica (COMAEM), el gran desafío está en la negación del diagnóstico en los adultos. “Muchos pacientes no aceptan la enfermedad y tampoco siguen un tratamiento médico. Lamentablemente recién aceptan el tratamiento cuando ya hay complicaciones como pérdida de visión, daño renal o incluso un infarto sin síntomas previos”, alerta.
Los adultos entre 45 y 65 años son particularmente vulnerables. Quispe advierte que la diabetes puede producir complicaciones como la neuropatía, la retinopatía, nefropatía, así como el pie diabético, los cuales deterioran la calidad de vida, afectando desde movilizarse hasta leer una pantalla, lo que podría llevar a la pérdida del empleo o a una jubilación anticipada. “La diabetes mal controlada también puede conducir a infartos agudos al miocardio o incluso coma diabético, sin haber presentado síntomas previos”, explica el médico.
¿Cómo proteger nuestra salud y productividad?
El doctor Quispe ofrece claves especialmente pensadas para quienes conviven con la diabetes:
Además de los conocidos consejos de alimentación equilibrada y saludable, actividad física y control del estrés, el experto enfatiza en los análisis y la adherencia al tratamiento. “Es necesario hacerse un control de glucosa y un dosaje de hemoglobina glicosilada, que nos permite evaluar cómo estamos controlando la enfermedad en los últimos 3 meses”, detalla.
Por otro lado, considerando que la diabetes compromete varios órganos, Quispe sugiere hacerse las siguiente evaluaciones: fondo de ojo, para descartar retinopatía diabética; microalbuminuria y dosaje de creatinina (en sangre y orina), para determinar la existencia de nefropatía diabética; un electrocardiograma y prueba de esfuerzo como evaluación cardiológica, según la edad; y un exámen clínico de los pies para detectar precozmente la presencia del pie diabético.
El médico concluye y recomienda no dejar de realizarse un chequeo médico anual, ya que hay varias enfermedades (no solo la diabetes) que son prevenibles o controlables si las detectamos a tiempo.