Salud en Casa.- Conformado por cerca de 86.000 millones de neuronas y capaz de generar nuevas conexiones a lo largo de toda la vida, el cerebro es uno de los órganos más complejos y resilientes del cuerpo humano1. Sin embargo, su delicado equilibrio puede alterarse por hábitos inadecuados, enfermedades y factores ambientales. Protegerlo prolonga nuestra capacidad de pensar, recordar y adaptarnos, previniendo el deterioro cognitivo antes de que ocurra.
El cerebro, que representa solo el 2% del peso corporal, consume alrededor del 20% de la energía que produce nuestro organismo. Esta alta demanda energética, junto con su exposición constante a estímulos, lo hace vulnerable a la inflamación, la falta de oxígeno y el estrés oxidativo2. Teniendo esto en cuenta, la combinación de hábitos saludables y un monitoreo médico oportuno puede reducir significativamente el riesgo de enfermedades como el accidente cerebrovascular, el Alzheimer o la enfermedad de Parkinson.
Cinco claves para cuidar la salud cerebral:
“Las tecnologías de imágenes diagnósticas han revolucionado nuestra capacidad de observar el cerebro en detalle. La tomografía computarizada y la resonancia magnética, por ejemplo, permiten visualizar desde microhemorragias hasta variaciones en la conectividad cerebral, sin procedimientos invasivos. Esto nos ayuda a identificar alteraciones en etapas muy tempranas y a diseñar estrategias de tratamiento personalizadas” señala Celso Alvarado, Gerente de Producto de Tomografía Computarizada en Siemens Healthineers.
Cuidar el cerebro es una estrategia para preservar nuestra identidad, creatividad y autonomía. Un enfoque integral que combine hábitos saludables y los chequeos médicos pueden marcar la diferencia entre reaccionar tarde o actuar a tiempo.