Salud en Casa.- Según el informe de la Situación Epidemiológica de la Mortalidad Materna (2000 -2023) del Ministerio de Salud, el país registró 262 muertes maternas , un recordatorio de las disparidades que aún existen en el acceso a servicios de salud adecuados.
En este contexto, Andrea Uribe, Country Manager para el Clúster Andino de Pfizer, subraya la importancia de priorizar la salud materna y neonatal en la agenda pública. “Para avanzar en la reducción de las muertes prevenibles, es esencial que garanticemos acceso universal a atención médica de calidad durante el embarazo, el parto y el posparto. El bienestar de las mujeres debe ser una prioridad de salud pública”.
La campaña lanzada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Comienzos saludables, futuros esperanzadores, busca sensibilizar sobre la necesidad de aumentar los esfuerzos para proteger a las madres y sus recién nacidos. Esta iniciativa tiene como objetivo difundir información que promueva embarazos y partos saludables, además de mejorar la atención en la salud posnatal.
A la par, la Semana de Inmunización, que se celebra del 26 de abril al 3 de mayo, refuerza el llamado a la acción en favor de la prevención de enfermedades. Las vacunas no solo protegen a las madres y recién nacidos de riesgos inmediatos, sino que son una herramienta esencial en la construcción de un futuro más saludable. A través de la inmunización, es posible evitar enfermedades graves que afectan a las mujeres durante el embarazo o a los recién nacidos, mejorando su calidad de vida y reduciendo la mortalidad.
“El compromiso con la salud materna y neonatal no puede ser aislado ni temporal. Requiere una acción sostenida, uniendo esfuerzos de la sociedad, gobiernos, organizaciones y sector privado para garantizar que todas las mujeres y recién nacidos tengan un comienzo saludable y un futuro esperanzador”, concluye Uribe.
La necesidad de priorizar estos temas sigue siendo urgente. A través de la prevención, el acceso equitativo a la atención médica y la protección mediante vacunas, se puede mejorar la vida de miles de mujeres y recién nacidos en el país.