¿CUÁLES SON LOS TRASTORNOS DIGESTIVOS MÁS COMUNES DURANTE LAS FIESTAS DE FIN DE AÑO?

¿CUÁLES SON LOS TRASTORNOS DIGESTIVOS MÁS COMUNES DURANTE LAS FIESTAS DE FIN DE AÑO?

5 Diciembre, 2018

Salud en Casa.- Cerca de las festividades de fin de año -Navidad y Año Nuevo- la comida suele cobrar mayor protagonismo, más aún en países que, como el Perú, gozan de una gastronomía muy variada. Por ese motivo, diciembre es un mes en el que los excesos alimentarios aumentan y traen consigo trastornos digestivos que pueden interrumpir las celebraciones.

 

 

Como explica el Dr. Víctor Monge, médico gastroenterólogo, es común que en esta temporada los peruanos incrementen su consumo de grasas, harinas, carnes, condimentos y licor. “La ingesta excesiva o la mala combinación de estos alimentos conduce a ciertos problemas digestivos que los peruanos suelen llevar a consulta con frecuencia hacia el final del año”, señala.

 

A fin de contribuir con su prevención y tratamiento adecuado, el Dr. Monge comparte información valiosa acerca de las molestias más comunes que ocasionan dolor abdominal antes y durante las festividades de Navidad y Año Nuevo:

 

REFLUJO Y ACIDEZ. Se caracterizan por la vinagrera y la sensación de quemazón detrás del esternón (en el pecho) y que a veces llega hasta la garganta. El ardor que se siente en la "boca del estómago" viene acompañado de dolor, náuseas y sensación de llenura. El reflujo y la acidez se asocian al consumo excesivo de componentes ácidos e irritantes como los tucos, salsas de tomate, mostaza, ají y similares.

 

Las gaseosas, el café, el chocolate y el licor también pueden inflamar la superficie interna del tubo digestivo y debilitar las válvulas que regulan el tránsito esófago gástrico. Para reducir el dolor abdominal, es muy probable que el médico opte por un antiespasmódico, un tipo de medicamento que actúa en los músculos del intestino neutralizando los retortijones que producen tanto malestar.

 

DIARREA.  Suele presentarse por el consumo de alimentos contaminados, por falta de higiene o no mantener la cadena de frío de ciertos alimentos. Como sabemos, diciembre coincide con el inicio del verano en nuestro país y el incremento de la temperatura crea el ambiente propicio para el desarrollo de gérmenes que contaminan los alimentos.

 

Estos microorganismos causan infecciones intestinales que se manifiestan con diarrea y que pueden asociarse con fiebre, dolor abdominal, náuseas y vómito. Los cuadros de diarrea conllevan alto riesgo de deshidratación y pueden ser mejor llevados si se consumen sales de rehidratación oral, zinc y probióticos, más aún, cuando es necesario, si se ha iniciado un tratamiento con antibióticos prescritos por el médico.

 

ESTREÑIMIENTO. Suele asociarse al alto consumo de carnes rojas, harinas, frituras, grasas y a la baja ingesta de frutas y verduras, típico de los platillos que se consumen en fiestas. Este tipo de alimentación condiciona un tránsito intestinal lento, con poca agua y la formación de heces duras de difícil evacuación.

 

La dieta rica en fibra, que se encuentra en frutas y verduras, ayuda a prevenir y manejar el estreñimiento, aunado al consumo de líquidos y al uso eventual de laxantes de contacto u osmóticos, para superar las crisis de constipación.

 

 

GASES. No menos frecuentes, los gases son un componente importante de la mala digestión o dispepsia, generan distensión abdominal, sensación de llenura, incremento de ruidos intestinales e, incluso, contracciones bruscas e involuntarias del intestino (espasmos intestinales).

 

Este problema es recurrente en personas que consumen altas cantidades de carbohidratos como menestra, pan, productos de pastelería con crema o alimentos altamente fermentables como la manzana, la col, la coliflor, el brócoli, el chocolate, entre otros. En caso de flatulencia, se debe evitar alimentos como la mostaza, los nabos y los frejoles, así como otros que contengan sorbitol o fructuosa.

 

En líneas generales, el Dr. Monge recomienda a los peruanos que celebraren las próximas fiestas de diciembre ser juiciosos y equilibrados al alimentarse, evitando comidas abundantes, cargadas de carbohidratos o demasiado condimentadas. Asimismo, subraya que es importante acudir al médico frente a dolor abdominal persistente y ante la presencia de vómito, diarrea, fiebre o decaimiento.