Salud en Casa.- Nosotros como peruanos debemos aprovechar al máximo los alimentos nativos con los que contamos, ya que aparte de ser económicos, son sumamente nutritivos y se pueden consumir en deliciosas preparaciones.
Generalmente, una gran cantidad de personas cree que los platos sabrosos y elaborados son altamente calóricos. Sin embargo esto no tiene por qué ser así, pues siempre existe la posibilidad de elaborarlos de una manera que nos permita no preocuparnos por estar contando las calorías.
Lo importante para evitar que un plato se sobrepase con las calorías es respetar la cantidad de ingredientes, y además, no añadir los que contienen muchas grasas o azúcares.
Otra manera de reducir las calorías de una preparación, es haciendo pequeños cambios en el uso de ingredientes. Por ejemplo, podemos hacer un delicioso ají de gallina (o pollo), cambiando la leche entera, por leche descremada, utilizando sólo la pechuga del pollo y agregando una mínima cantidad de aceite. De esta manera, nos damos el gusto de comer algo rico sin cargos de conciencia ni remordimientos por la cantidad de calorías de la preparación.
Por eso, y con motivo de las fiestas patrias, mi hermana Carolyn (Chef egresada de Le Cordon Bleu), comparte con nosotros una receta de papa a la huancaína, deliciosa y reducida en calorías:
Receta para 4 porciones:
- En una licuadora colocar 3 ajíes amarillos (previamente retirarle las pepas y las venas).
- Añadir 250 gr. de queso fresco light, 3/4 taza de leche evaporada light y sal al gusto.
- Licuar hasta obtener una textura cremosa.
- Servir la crema sobre rodajas de papa previamente sancochadas y peladas, y decorar con hojas de lechuga y aceitunas negras.
*Recuerda que la papa es una fuente de carbohidratos. Por eso, si vas a consumir esta preparación, lo recomendable es ya no consumir otro tipo de carbohidratos (como arroz, fideos, camote, etc.), pues lo más probable es que te sobrepases con las calorías.
Este es solo un ejemplo de cómo podemos preparar los platos que tanto nos gustan, pero que por temor a engordar, dejamos de consumirlos. Debemos cambiar esa idea de que todo lo que es rico engorda, y que lo sano y nutritivo no es sabroso. Es simplemente cuestión de ingeniárselas y poner nuestro toque de creatividad en la cocina.